Experto en vivienda protegida considera que el teletrabajo debería aumentar la superficie óptima de una VPO
José Sánchez Síglez, abogado especializado en viviendas de protección oficial (VPO) aboga por establecer 20 metros cuadrados por cada persona de la casa, en lugar de los 17 establecidos actualmente
Marbella, 18 de noviembre de 2022.- El abogado experto en vivienda protegida o vivienda de protección oficial (VPO) José Sánchez Síglez señaló durante la sexta sesión de los XVIII Cursos de Urbanismo de Marbella que el teletrabajo, esa manera de trabajar a la que obligó el estado de alarma decretado por el COVID-19 y que se ha instaurado en muchas empresas como una manera más de desarrollar la labor de sus empleados, “debería provocar una modificación en la legislación en cuanto a los metros cuadrados que debe haber en una vivienda protegida por cada miembro familiar”. Actualmente está establecido en 17 metros cuadrados “y deberían ser al menos 20”, concretó. Sánchez Síglez justificó su postura en que teletrabajar “supone tener un espacio en que poder desarrollarlo”.
El letrado especializado en vivienda protegida ofreció una ponencia en los cursos organizados por la Fundación Formación y Desarrollo Urbanístico (FYDU) y advirtió que “es falso que las viviendas protegidas estén destinadas a colectivos necesitados”. En la legislación andaluza se establece que los beneficiarios pueden ser aquellos que tengan una renta de hasta cinco veces el IPREM “que viene a ser más de 45.000 euros en el caso de una sola persona, o de unos 60.000 si se toma como referencia la pareja”, especificó.
Además se refirió al concepto “digno y adecuada” que aparece reflejado en la Ley Reguladora del Derecho a la Vivienda en Andalucía y dijo que “no significa que la persona o personas en cuestión tengan que ser los propietarios de la misma”. Del mismo modo puntualizó que una vivienda “de calidad”, otro de los requisitos que aparecen en la legislación, se traduce en que haya servicios públicos cercanos a las viviendas, como un colegio, una instalación deportiva, un centro sanitario, una parada del autobús, etc., “que tengan los equipamientos necesarios para una vida adecuada”.
Completó la sexta jornada de los cursos la ponencia sobre el Plan Parcial desarrollada por Francisco Merino, arquitecto y ex jefe de servicio de Planeamiento del Ayuntamiento de Marbella. Aludió a la consideración que la Ley de Impulso a la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (LISTA) hace sobre el instrumento de planeamiento y señaló que “el intento de la nueva legislación andaluza de que los instrumentos de ordenación detallada sean autónomos no veo si va a prosperar demasiado porque al fin y al cabo la ley dice que para tramitar una propuesta de delimitación ha de ser conforme a las determinaciones de los instrumentos de ordenación general”. Argumentó en este sentido que “si se anulara ese instrumento pudiera pensarse que el plan redactado, al amparo de sus determinaciones, debiera quizá anularse también”. Concluyó a este respecto que “es una cuestión que se verá con el transcurrir de los años y la jurisprudencia”.